Enrique Lihn, MESTER DE JUGLARIA
Editorial Hiperión Madrid, 1987, 77 pp.
Por David Valjalo
Publicado en Revista Literatura Chilena creación y crítica N°41/42, 1987
"A partir de José Martí y de Rubén Darío una parte fundamental de la poesía en lengua española, sin duda la mayor y a menudo la mejor, se ha escrito en América. El siglo XX, tan rico para la lírica en España, lo ha sido mucho más para la América que habla en español, que en él ha alcanzado el pleno dominio de sus múltiples voces. Sería un aislamiento suicida hacia las riquezas de nuestra propia lengua ignorar la obra de tantos poetas de primera magnitud." Tomamos lo anterior de la contraportada del volumen. En anteriores oportunidades nos hemos referido a las vinculaciones naturales que existen a ambos lados del océano, en lo que atañe al idioma y sobre todo a la poesía. No está demás recordar que después de Martí y de Darío, hitos fundamentales (en lo que respecta a dichas vinculaciones, mencionando nombres que se refieren exclusivamente a nuestro país), fueron Huidobro —desde fines de la década de los diez— y Neruda —década de los treinta.
Tal vez, el término de la guerra civil, la iniciación de la segunda guerra mundial y el régimen político español que imperó por largo tiempo, hayan producido esta paralización en la península. Ubico la zona geográfica exacta ya que el exilio intelectual español mantuvo una fecunda labor sobre todo en Argentina y México, aunque nosotros no podemos quejamos del aporte cultural del exilio español, el cual no del lodo numeroso tuvo gran valor. Después de pasar mucha agua bajo los puentes, al parecer la barrera geográfica se ha roto totalmente en lo que respecta a narrativa y está demás mencionar antecedentes. Entramos a suponer que es asunto mercantil el que este fenómeno no se repita en poesía. El presente volumen en parte lo desmiente. Ediciones Hiperión, cuya sede no puede estar mejor ubicada, a sólo unos pasos de la Puerta de Alcalá, y cuyas prensas casi exclusivamente editan poesía, se ha destacado en este rubro del papel impreso en los últimos años. Su serie poesía Hiperión ya tiene a su haber más de cien volúmenes. El de Lihn corresponde al 108. Su catálogo tiene variantes. He aquí unas muestras tomadas al azar: Holderlin, Nietzsche, Mallarmé, Rimbaud, Guillén, Celaya, Ferlinghetti, Aragón, Plath. Y también, y he aquí otro valor a su haber: Villena, Andreu, Rossetti, Rosselló, Castro, Guzmán, o sea, los nuevos valores definitivos de la reciente poesía española.
Siete son solamente los poemas que integran este volumen. Todos seleccionados por el propio autor, quien habla de "poemas largos", refiriéndose a los aquí impresos. Es un acierto la selección misma por cuanto mantienen cierta unidad en su conjunto y suponemos que este ha sido el motivo de escoger trabajos que van desde 1963 (La pieza oscura), hasta el presente 1987 (Pena de extrañamiento). De los diez y ocho libros publicados hasta la fecha, sólo de cuatro de ellos se han tomado éstos, eso sí, dando una faceta que caracteriza definitivamente la poesía de Lihn. El tiempo y su obsesión por él parece ser el común denominador de todos ellos. Lo conceptual predomina en esta selección, desplazando lo lírico propiamente tal, acentuando de esta manera una de las principales características del poeta. Dado el valioso trabajo que realiza Hiperión, editando casi exclusivamente poesía, damos su dirección: Salustiano Olózaga 14, 28001 Madrid.